TRABAJO NOCTURNO: RIESGOS FÍSICOS, MENTALES Y DEL SUEÑO
– Trabajar de noche va en contra de todo el sistema circadiano del cuerpo humano.
Pepe Herrera
Trabajar de noche o bajo un esquema de turnos rotativos es una realidad para millones de personas en todo el mundo. Aunque estas modalidades laborales son esenciales para el funcionamiento de muchas industrias —como la salud, la seguridad, el transporte y la manufactura—, también pueden tener un impacto significativo en la salud de los trabajadores, afectando no solo el descanso, sino también el bienestar físico y mental.
Trabajar de noche va en contra de todo el sistema circadiano del cuerpo humano – En la conferencia “Trastornos del Sueño, Físicos y Mentales en Trabajadores por Cambio de Turno”, el Dr. Fructuoso Ayala Guerrero, de la Facultad de Psicología de la UNAM, explicó en detalle cómo estos esquemas laborales influyen en el cuerpo y la mente, qué riesgos implican a corto y largo plazo, y qué medidas pueden tomarse para reducir sus efectos negativos.
Nuestro origen biológico: el ritmo vital del organismo – Trabajar de noche o en turnos rotativos es una modalidad laboral necesaria, pero que también genera consecuencias que afectan directamente el bienestar y el rendimiento de las personas. Para comprender estos efectos, es fundamental analizar cómo funciona el cuerpo humano en relación con el tiempo, el sueño y los ritmos naturales que nos rigen.
Desde la formación de la Tierra, su rotación constante ha generado ciclos de luz y oscuridad que se repiten cada 24 horas. Estos ciclos han moldeado profundamente la evolución de los seres vivos. Los seres humanos —como muchos otros organismos— desarrollaron la capacidad de organizar sus funciones físicas y mentales en sincronía con este ritmo diario.
Durante el día, cuando hay luz, realizamos nuestras actividades: estudiamos, trabajamos, nos desplazamos e interactuamos. Esto implica un gran gasto de energía que no puede mantenerse indefinidamente. Por eso, el cuerpo necesita una fase de recuperación, que ocurre típicamente durante la noche, en la oscuridad. Es en ese momento cuando el organismo descansa, se recupera y se prepara para un nuevo ciclo.
El reloj biológico y los desajustes del trabajo nocturno – Este comportamiento cíclico no es solo una costumbre social o cultural, sino que está profundamente grabado en nuestra biología. En el cerebro humano existe una estructura llamada núcleo supraquiasmático, ubicada justo encima del quiasma óptico, que actúa como un auténtico reloj biológico interno.
“Este reloj recibe información a través de la luz que entra por los ojos, y a partir de ella organiza el funcionamiento de todo el cuerpo: desde los niveles hormonales hasta el estado de ánimo, la capacidad de concentración, la fuerza muscular y el ritmo cardíaco. Cuando hay luz, el reloj activa funciones asociadas con la vigilia y la actividad; cuando hay oscuridad, inicia los procesos que conducen al descanso y al sueño”.
— Dr. Fructuoso Ayala Guerrero, Facultad de Psicología, UNAM
De igual manera, el cuerpo humano regula sus funciones mediante la liberación de diferentes hormonas, y dos de ellas son especialmente importantes en este contexto: el cortisol y la melatonina.
“El cortisol es una hormona que se libera principalmente durante el día. Su función principal es aportar energía al cuerpo para que pueda realizar sus actividades. Su liberación sigue un patrón diario y está estrechamente vinculada a la presencia de luz”.
— Dr. Fructuoso Ayala Guerrero, Facultad de Psicología, UNAM
“La melatonina, en cambio, es conocida como la ‘hormona de la oscuridad’. Comienza a liberarse al anochecer y su función es preparar al cuerpo para dormir, reduciendo la actividad cerebral y fisiológica. Indica que ha llegado el momento de descansar y ahorrar energía”.
— Dr. Fructuoso Ayala Guerrero, Facultad de Psicología, UNAM
Cómo se alteran estos ciclos con el trabajo por turnos – En las personas que trabajan de noche o en turnos rotativos, estos ritmos hormonales naturales se desorganizan: la melatonina puede liberarse cuando el trabajador necesita estar despierto y el cortisol puede activarse a destiempo, alterando la energía y el estado de alerta. Este desfase biológico afecta la salud y el rendimiento.
El sueño y sus implicaciones – El sueño no solo es descanso, sino un proceso activo, con múltiples etapas y funciones. Durante él, el cuerpo recupera energía, repara tejidos, resintetiza sustancias esenciales, procesa información, consolida aprendizajes y regula el equilibrio emocional. Para cumplir estas funciones, importa tanto la cantidad como la calidad.
“La cantidad varía según la edad (por ejemplo, un adulto joven necesita en promedio unas 7.5 horas diarias), pero también es esencial que el sueño sea profundo y continuo. La falta de sueño o un sueño interrumpido, como ocurre con frecuencia en quienes trabajan por turnos, tiene consecuencias acumulativas: irritabilidad, falta de concentración, disminución de la memoria, fatiga crónica, e incluso un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas”.
— Dr. Fructuoso Ayala Guerrero, Facultad de Psicología, UNAM

Turnos rotativos: el “jet lag” laboral – Cuando una persona trabaja durante la noche, va en contra de todo su sistema circadiano, diseñado para mantenerse activo durante el día y descansar por la noche. Esta alteración provoca una desincronización interna, que también afecta a quienes tienen turnos cambiantes.
El trabajo por turnos genera una especie de “jet lag” biológico constante – Con respecto a los trabajadores que realizan turnos rotativos, estar de día a noche, luego al revés, y así sucesivamente impide cualquier adaptación estable al nuevo ritmo. Esto genera una especie de “jet lag” constante que afecta:
- La calidad y profundidad del sueño
- El estado de ánimo
- La capacidad de atención
- La coordinación motora
- La resistencia física
Diversas investigaciones demuestran que los trabajadores con rotaciones frecuentes presentan mayor riesgo de fatiga crónica, trastornos digestivos, ansiedad, depresión y enfermedades cardiovasculares. Aunque estos problemas no dependen solo del horario laboral, el trabajo nocturno es un factor que contribuye de manera importante.
Consecuencias reales: riesgo de accidentes y errores graves – Las consecuencias del trabajo nocturno y rotativo no son teóricas: hay evidencias concretas de un mayor riesgo de accidentes, sobre todo entre la 1 y las 4 a. m., cuando el estado de alerta disminuye y los reflejos son más lentos.
Conductores de transporte y personal de la salud —médicos, enfermeras, equipos de emergencia— enfrentan estos riesgos cuando cubren jornadas prolongadas o contrarias a sus ritmos biológicos. Tomar decisiones críticas bajo fatiga puede comprometer la seguridad propia y la de otros.

Estrategias para reducir el impacto – Aunque el trabajo nocturno o por turnos no puede eliminarse, puede gestionarse mejor:
- Mantener horarios fijos siempre que sea posible, evitando rotaciones frecuentes.
- Promover higiene del sueño (ambientes oscuros y silenciosos, reducir pantallas antes de dormir).
- Planificar tareas más demandantes cuando el cuerpo tiene mejor rendimiento.
- Ofrecer pausas y espacios adecuados para descanso durante la jornada nocturna.
- Exposición controlada a luz brillante durante el turno nocturno y uso de gafas bloqueadoras de luz azul al salir para favorecer el sueño diurno.
- Capacitar a empleadores y trabajadores sobre los límites del cuerpo y la importancia de respetar el ritmo circadiano.
Necesario reconocer el daño del trabajo nocturno – El trabajo nocturno y por turnos representa un desafío para el cuerpo y la mente al forzar una adaptación contraria a nuestra biología. Comprender estos efectos y aplicar estrategias basadas en la evidencia es clave para proteger la salud y el bienestar de millones de trabajadores.
VIDEO – 2o. Congreso Internacional de Psicología del trabajo
Información: GlobalUNAM / Imagen: GlobalUNAM
La Voz del Árabe (LVÁ) – VIDA y SALUD – Cd. de México, octubre 22 del 2025
Las declaraciones y opiniones expresadas en esta publicación sitio web en Internet son exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de La Voz del Árabe.
Descubre más desde La Voz del Árabe
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
