VIAJE ENTRE MÉXICO Y MARRUECOS: EL SAHARA MARROQUÍ COMO PUENTE HACIA UN FUTURO COMPARTIDO
– El Observatorio Mexicano del Sahara Marroquí invitó al profesor Hamid Aboulas a México.
LVÁ
La Ciudad de México fue, durante los días 17,18 y 19 de septiembre, escenario de un diálogo que cruzó océanos y siglos de historia. En el centro de esta conversación estuvo el profesor Hamid Aboulas, académico marroquí y experto en gobernanza, invitado por el Observatorio Mexicano del Sahara Marroquí para compartir una idea poderosa: el Sahara, además de ser parte inseparable de Marruecos, es hoy un espacio de oportunidades que puede tender puentes hacia América Latina.
El ciclo comenzó en la Universidad Panamericana. El salón estaba lleno de estudiantes, profesores y diplomáticos cuando Aboulas abrió su intervención con un viaje cultural: habló de música, danzas, recetas y artesanías que, aunque nacieron a miles de kilómetros, parecían dialogar entre Marruecos y México. De ahí saltó a la memoria histórica: la resistencia marroquí frente al colonialismo y la lucha mexicana por la independencia. Dos pueblos que, en distintas latitudes, defendieron con fiereza su identidad. El tono cambió cuando el profesor desplegó mapas y cifras sobre los grandes proyectos en el Sahara marroquí: el Puerto Atlántico de Dajla, la apuesta por energías limpias, la gestión del agua en zonas áridas. “Estas infraestructuras —explicó— no son solo para Marruecos, son plataformas desde donde México también puede proyectar su comercio hacia África y Europa”.
Al día siguiente, el diálogo se trasladó a la Universidad Nacional Autónoma de México. Allí, bajo el título “Oriente y Occidente en diálogo: un viaje entre Marruecos y México”, Aboulas retomó la historia para mostrar cómo los caminos de ambos países se cruzaron en tiempos remotos: el legado andalusí, la huella de las rutas comerciales, las expulsiones que transformaron culturas. La conversación se proyectó después hacia el presente: México como actor clave en América Latina, Marruecos como puerta de entrada a África y Europa. “Son dos orillas que pueden encontrarse en el Atlántico”, señaló el académico, subrayando que las regiones de Dajla y Laâyoune representan un modelo de desarrollo sostenible que podría inspirar políticas en tierras mexicanas.
El 20 de septiembre, la reflexión culminó en la Casa de la Cultura de la Alcaldía Álvaro Obregón con una mesa redonda. Allí no se habló solo de historia ni de cultura, sino de futuro inmediato. Energías renovables, agricultura resiliente, economía azul, logística marítima. Aboulas insistió en una idea concreta: vincular los puertos marroquíes y mexicanos para abrir un nuevo corredor comercial entre tres continentes. Académicos y especialistas mexicanos coincidieron en que los desafíos que enfrentan ambos países —cambio climático, seguridad alimentaria, transición energética— son similares y, por tanto, las soluciones pueden ser compartidas.
Al concluir la última jornada, quedó claro que las conferencias fueron algo más que actos académicos: fueron el inicio de un relato compartido. Marruecos y México, desde sus extremos del Atlántico, descubrieron que sus historias dialogan y que sus futuros pueden entrelazarse. Como recordó Aboulas, con la serenidad de quien habla de certezas: “El Sahara marroquí no es un límite, es un puente. Y en ese puente, México tiene un lugar”.
Imagen: LVÁ
La Voz del Árabe (LVÁ) – MARRUECOS – Cd. de México, septiembre 25 del 2025
Las declaraciones y opiniones expresadas en esta publicación sitio web en Internet son exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de La Voz del Árabe.
Descubre más desde La Voz del Árabe
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
