FUERZAS SIRIAS REALIZAN «EJECUCIONES» EN ZONA DRUSA. ISRAEL LANZA ATAQUES

– Damasco desplegó tropas en la zona después de que los enfrentamientos entre combatientes drusos y tribus beduinas mataran a decenas de personas…

Las autoridades sirias fueron acusadas el martes de llevar a cabo ejecuciones sumarias de civiles en la provincia predominantemente drusa de Sweida, donde Israel dijo haber lanzado ataques contra las fuerzas gubernamentales en defensa de la minoría religiosa.

Damasco desplegó tropas en la zona después de que los enfrentamientos entre combatientes drusos y tribus beduinas mataran a decenas de personas, el ministro de Defensa sirio declaró un alto al fuego el martes en la ciudad de Sweida, a la que las fuerzas gubernamentales entraron por la mañana.

Sin embargo, los residentes dijeron a AFP que el anuncio tuvo poco efecto perceptible sobre el terreno y acusaron a las tropas gubernamentales y sus aliados de arrasar los barrios drusos.

El Ministerio del Interior reconoció que los enfrentamientos continuaron hasta la noche.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos dijo el martes que las fuerzas del gobierno sirio y sus aliados habían ejecutado a 21 civiles drusos en Sweida y sus alrededores.

Se encontraban entre las al menos 203 personas que murieron en la violencia desde la madrugada del domingo, incluidos 93 miembros de las fuerzas de seguridad, otros 71 drusos y 18 beduinos, según el monitor de guerra.

Fuerzas de los Ministerios de Defensa e Interior llevaron a cabo ejecuciones en el campo de 12 civiles después de asaltar la casa de huéspedes de la familia Radwan en la ciudad de Sweida, dijo anteriormente el Observatorio.

Grupos armados afiliados al gobierno también fueron responsables de matar a tiros a tres hermanos frente a su madre en la provincia de Sweida, según el monitor.

Rayan Maarouf, editor en jefe del sitio web de noticias Suwayda 24, dijo que las fuerzas de seguridad habían participado en «prácticas salvajes» y agregó que había habido informes de civiles muertos, «docenas de ellos… pero no tenemos cifras precisas».

– Ataques israelíes – Aunque la mayoría de los líderes religiosos drusos habían dicho anteriormente que apoyaban el despliegue del gobierno después de los enfrentamientos con los beduinos, al menos una figura importante instó a la resistencia armada, habiendo pedido previamente «protección internacional».

El vecino Israel, que tiene su propia minoría drusa, ha tratado de presentarse como defensor de la comunidad, al tiempo que advierte al gobierno sirio que no mantenga ninguna presencia militar al sur de Damasco, que Israel considera una amenaza a la seguridad.

El primer ministro Benjamin Netanyahu y el ministro de Defensa, Israel Katz, anunciaron el martes ataques contra «fuerzas y armamento del régimen» que, según dijeron, estaban destinados a ser utilizados contra los drusos.

«Estamos actuando para evitar que el régimen sirio les haga daño y para garantizar la desmilitarización de la zona adyacente a nuestra frontera con Siria», dijeron ambos en una declaración conjunta.

Poco después, el ejército israelí anunció que había comenzado a atacar vehículos militares en la zona. Los medios estatales sirios también informaron de ataques.

El gobierno islamista de Siria, que el sábado envió un emisario a Azerbaiyán para una primera reunión cara a cara con un funcionario israelí, condenó «en los términos más enérgicos la traicionera agresión israelí» y advirtió que tenía derecho a defenderse.

Los ataques mataron a varios agentes de seguridad, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores, así como a «varios civiles inocentes».

El enviado especial de Estados Unidos, Tom Barrack, cuyo gobierno está estrechamente aliado con Israel y ha estado tratando de reiniciar su relación con Siria, calificó la violencia de «preocupante».

Washington buscaba «una solución pacífica e inclusiva para los drusos, las tribus beduinas, el gobierno sirio y las fuerzas israelíes», añadió.

– ‘Alto el fuego total’ – El ministro de Defensa, Murhaf Abu Qasra, declaró poco antes del mediodía (0900 GMT) del martes «un alto el fuego completo» en la ciudad de Sweida después de mantener conversaciones con representantes locales.

Mientras tanto, representantes drusos se reunieron en la residencia del líder clave, el jeque Youssef Jarbouh, para discutir la implementación del alto el fuego, dijo una fuente cercana a los participantes.

Pero el martes por la noche, el Ministerio del Interior dijo que «los enfrentamientos aún continúan en algunos barrios», añadiendo que se estaban realizando esfuerzos «para restablecer totalmente el control».

«Los acuerdos alcanzados previamente con los representantes locales», añadió, «pronto fueron violados cuando los grupos armados ilegales reanudaron los ataques contra la policía y el personal de seguridad».

Se impondrá un toque de queda en un intento de detener la violencia que estalló entre combatientes drusos y beduinos durante el fin de semana y que desde entonces se ha extendido por toda la provincia de Sweida.

Las fuerzas gubernamentales dijeron que intervinieron para separar a los dos bandos, pero terminaron tomando el control de varias zonas drusas alrededor de Sweida, informó un corresponsal de AFP.

– ‘No contra el Estado’ – El Observatorio, los dirigentes drusos y los testigos dijeron que las tropas gubernamentales habían entrado en la ciudad acompañadas por combatientes beduinos y se habían unido a ellos para atacar a los drusos.

Un corresponsal de la AFP que llegó a Sweida poco después de que las tropas informaran de cadáveres tirados en calles desiertas y disparos esporádicos.

«Estoy en el centro de Sweida. Hay ejecuciones, casas y tiendas incendiadas, robos y saqueos», declaró a la AFP por teléfono un habitante de Sweida, refugiado en su casa.

La situación recuerda ejemplos pasados de violencia sectaria y pone de relieve los desafíos de seguridad que enfrenta el líder interino Ahmad al-Sharaa desde que sus fuerzas derrocaron al gobernante Bashar al-Assad en diciembre, tras casi 14 años de guerra civil.

Amal, una residente de 46 años, dijo que temía que se repitieran las masacres ocurridas en marzo en el noroeste de Siria, donde murieron más de 1.700 civiles, en su mayoría alauitas, supuestamente a manos de grupos afiliados al gobierno.

«No estamos en contra del Estado, pero sí estamos en contra de entregar las armas sin un Estado que trate a todos por igual», afirmó.

 

Información: Al-Monitor / Imagen: Sam HARIR    

La Voz del Árabe (LVÁ) – NOTICIAS – Cd. de México, julio 17 del 2025

 

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