EL DABKE: DIVERSIÓN Y TRADICIÓN DE ORIENTE
¿Cuántas veces ha escuchado decir tanto a la gente, como a usted mismo, que debe realizar una actividad física para desconectarse por un instante del estrés?
Lic. Laura Tejeda Maza*
¿Busca obtener un cuerpo tonificado? ¿Quiere ponerse en forma divirtiéndose? ¿Quiere descubrir nuevos mundos? ¿Necesita un cambio de perspectiva? ¿Quiere hacer nuevos amigos? ¿Busca una actividad apta para todas las edades? ¡No busque más: el Dabke es para usted!
¿Cuántas veces ha escuchado decir tanto a la gente, como a usted mismo, que debe realizar una actividad física para desconectarse por un instante del estrés del día a día y obtener un estilo de vida más saludable? Bailar es una buena solución, porque además de ser una actividad física, se desarrollan competencias tales como la memoria, mientras que uno se divierte.
Existe un gran número de danzas en el Mundo Árabe, entre las cuales se encuentra el dabke (literalmente “patada”), la cual es una danza tradicional de Medio Oriente (Palestina, Siria, Jordania, Irak, Líbano…). Esta danza folclórica (naturalmente) es parte y vía de expresión de la esencia de la cultura de la zona.
Comúnmente, esta danza está presente en todo evento social: hombres y mujeres bailan en una línea formada de derecha a izquierda, la cual está compuesta por al menos dos personas, pudiendo ser alargada en cualquier momento al unirse nuevos participantes en cualquier posición.
Se le llama ras a la persona que guía dicha línea y quien, además, realiza ocasionalmente movimientos más complejos, los cuales consisten en diversos movimientos de piernas, saltos, gritos y aplausos. Cabe mencionar que, puesto que es una danza social, el ras baila para su pueblo; dichos movimientos pueden ser realizados con dos integrantes más, denominados kershi, quienes tienen la opción de realizar los mismos movimientos que éste, mientras que el resto de los integrantes de la fila realizan un paso base que consiste en un cruce de pies simple, tomados de la mano o los hombros.
Existen varios tipos de Dabke: por ejemplo, solamente en Jordania ¡hay diecinueve tipos diferentes!, pudiendo ser algunos más saltaditos, estilizados o pesados (los pasos son realizados más hacia abajo que hacia arriba).
El dabke es una danza de ronda, similar a las danzas kurda y armenia. En las danzas de ronda se crea un fuerte lazo social de hermandad y cooperación entre los participantes. Dicho lazo es parte integral e incluso la base misma de la creación del dabke. Las historias de cómo nació el dabke varían de región en región; aquí explicaremos específicamente la versión libanesa: se dice que esta danza surgió en la montaña libanesa donde las casas eran tradicionalmente construidas de adobe, piedra y arcilla, con techos de madera, paja y barro, los cuales debían estar bien aplanados de forma pareja, al igual que la fabricación de adobe, para esto los dueños de la casa llamaban a sus vecinos por ayuda. Era un trabajo pesado por lo que al mismo tiempo algunos cantaban poesía. A través del tiempo se fue incorporando música y la danza se fue diversificando y difundiendo a otras regiones. Posteriormente se crea el dabke de escenario, donde todos los participantes realizan los mismos movimientos, ya sean complejos (pasos de ras) o no, pudiendo estar agarrados o no. Hoy en día, todavía se baila dabke tanto en Medio Oriente como en otras partes del mundo. Esta danza se caracteriza por la fuerza y la vitalidad de la gente de la montaña, siendo esta danza el reflejo de su espíritu.
El amor por una mujer o el orgullo nacional son los temas centrales de las canciones de dabke. De entre los cantantes clásicos están Majida al-Roumi, Najwa Karam, Julia Boutros, Fares Karam, Melhen Zein y Feiruz.
El Dabke, como cualquier elemento cultural, tiene una importancia primordial para los miembros de ciertas naciones de Medio Oriente, ya sea que todavía residan allí o que estén en diáspora, siendo el testigo de la lucha y las aspiraciones de su pueblo. Esto es particularmente cierto para los palestinos, quienes se basan en su cultura folclórica para reafirmar su identidad, de la misma manera que lo hacen los miembros de la diáspora de otras naciones. De hecho, hay muchas organizaciones que promueven ésta y otras actividades culturales, ya sea en su país de origen, como el Centro Cultural Ibdaa en Palestina, o en las zonas más remotas, como los Centros Libaneses en México y Argentina.
En mi experiencia personal, el dabke es un excelente ejercicio tipo cardio, así como una forma rápida y simple de ponerse en forma (en un período de dos a cuatro meses, realizándolo dos horas por semana). También, ayuda a mejorar la flexibilidad, la fuerza (sobre todo en tobillos, piernas y espalda, al igual que en cierta medida en abdomen) y la coordinación de manera significativa (¡no estoy hablando de perder peso!: recuerde que el músculo pesa más que la grasa). Además, el dabke tonifica y reafirma las piernas (¡puede incluso suceder que descubramos en nosotros músculos que ni siquiera sabíamos que existían!).
Lo más importante es no darse por vencido, las primeras semanas son las más difíciles, porque es una actividad intensa, pero como es una actividad realmente completa con excelentes resultados en poco tiempo, ¡vale la pena el esfuerzo! Verá cómo se sentirá orgulloso(a) de usted mismo de ser asiduo y de los resultados logrados. A pesar de esto, se debe tener cuidado con las rodillas, ya que es una actividad de alto impacto para esta zona. Sobre todo no olvide que lo más importante de todo es ¡divertirse!
*Laura Tejeda Maza: Licenciada en Estudios Árabes y Maestra en FLE, ambas realizadas en Francia. Políglota y redactora en tres revistas, entre las cuales se cuenta La Voz del Árabe. Aborda diversas temáticas sobre Francia y Mundo arabo-musulmán.
La Voz del Árabe (LVÁ) – CULTURA – Cd. de México, febrero 3 del 2017