domingo, diciembre 10, 2023

La Voz del Árabe

La Voz del Árabe. Medio Informativo sobre las actividades económicas, sociales, culturales y políticas del Mundo Árabe en México y el mundo.

OUM KALSOUM LA ESTRELLA DE ORIENTE

A sus dieciséis años de edad, es invitada a cantar a la casa de un rico comerciante de El-Sinbillawayn a la ocasión de la fiesta de “Eïd el-Fitr”, la cual marca el fin de Ramadán.

Lic. Laura Tejeda Maza

Oum Kalsoum Ibrahim el-Sayyed el-Shark, conocida como “El-Sett”, la Dama, o “Kawkab el-Shark”, la Estrella de Oriente, es considerada como la más grande cantante del Mundo Árabe. No se conoce la fecha exacta de su nacimiento, sólo se sabe que nació alrededor del año 1900 en una familia modesta en Tamay el-Zahayra, en el Delta del Nilo. Su madre, Fátima, y su padre, Ibrahim, tuvieron dos hijos antes que ella: Khaled y Saïda.

Su padre tenía a cargo la mezquita  e interpretaba cantos folclóricos a vocación religiosa durante los casamientos y durante los mawalid, celebración del nacimiento de una mujer o de un hombre piadoso. Un día su padre la sorprende recitando los versos del Corán y es cautivado por su voz celestial, y le propone unirse a la tropa que había formado, iniciándola al arte de la recitación de los versos del Corán, particularmente los del zikr, versos del Corán que se recitan durante el rezo de la noche y del crepúsculo del viernes.

Poco después, a la ocasión del cumpleaños de su vecina Aïcha, se ve confrontada por primera vez a un público, de alrededor de quince personas. Al terminar su canto del zikr, un diluvio de aplausos la congratulan y a partir de ese día la reputación de su voz de oro se difunde a través del Delta y la tropa de su padre es solicitada en todas partes.

A pesar de esto, Ibrahim es un hombre religioso que no permite que su hija se presente en escenario con un vestido a la “occidental”, por lo que Oum Kalsoum se vestía siempre con un gallabeya de hombre, vestimenta tradicional nativa del Valle del Nilo, decisión que no fue contestada por la joven cantante. Hay que recordar que en ese entonces Egipto era un país de tradición secular en el cual es impensable que una mujer, y más aún un infante, se revelara contra la autoridad de su padre.

A sus dieciséis años de edad, es invitada a cantar a la casa de un rico comerciante de El-Sinbillawayn a la ocasión de la fiesta de “Eïd el-Fitr”, la cual marca el fin de Ramadán. Entre los invitados se encuentra nada más y nada menos que  Zakaria Ahmed, el mejor músico de oud de todo Oriente, y el cheikh Aboul ‘Ela, gran cantante muy admirado por la joven artista. Cuando Oum Kalsoum termina su canto, Abou ‘Ela se precipita hacia Ibrahim para proponerle tomar a su hija bajo su protección, darle clases y ayudarle en su carrera, todo esto en el Cairo.

La promesa de sus amigos, Aboul ‘Ela y Zakaria Ahmed, de llevarla al Cairo se concretizó en 1923. Aboul ‘Ela la cultiva  con los poetas árabes y le enseña el arte del dawr, cantico profano en árabe dialectal; en cuanto a Zakaria Ahmed, le compone taktoukas, un tipo de música popular tradicional.

El empresario Sadik Ahmed le consigue un contrato en un teatro célebre del Cairo. A pesar de su talento y de su habilidad para manejar la lengua árabe, en repetidas ocasiones la joven cantante fue menospreciada, debido a su vestimenta de hombre; sin embargo, tras su cantico la audiencia se rendía a sus pies.

En una presentación de Oum Kalsoum en febrero de 1925, se encontraba entre los asistentes Ahmed Rami, hombre de gran cultura, poeta y políglota, quien fue extasiado con la presentación de la cantante pues, después de entonar la Fatiha, primera sura del Corán, entonó uno de sus poemas, al que su cántico dio una belleza y vitalidad nueva. A partir de ese momento Ahmed Rami le compuso un centenar de canciones. En ese mismo año, Oum Kalsoum grabó su primer disco intitulado: El amante es traicionado por sus ojos, letra de Rami y música de Aboul ‘Ela. Igualmente, en este periodo la cantante decide presentarse en escena portando un vestido verde, color sagrado del Profeta Mohammed, con un pañuelo en la mano, que devino más tarde su símbolo.

Para este entonces, Oum Kalsoum se había convertido en un ícono al encarnar la revitalización de la música árabe.  Pero, no todo fue color de rosa, pues en aquella época el tracoma que aquejaba sus ojos desde pequeña empeoró, haciéndole insoportable la luz, obligándola a usar en permanencia lentes oscuros.

El primer congreso de la música árabe se lleva a cabo en 1932 y, naturalmente Oum Kalsoum estuvo presente, teniendo la oportunidad de cantar frente a la realeza. En este mismo año la estación de radio Masr (Egipto en árabe) le propone al ícono emitir conciertos, a lo que ella acepta y escoge ser emitida todos los primeros jueves de cada mes. Así mismo, el mundo cinematográfico la demanda recurrentemente.

En 1952, la milicia toma el poder y el Coronel Abdel Nasser toma las riendas del país. A pesar de este gran cambio de gobierno, las cosas no cambiaron para la cantante pues seguía siendo igualmente solicitada por el nuevo gobierno.

Después de sufrir de bocio evolutivo y de ser operada en Washington, tenía que realizar visitas frecuentes al médico para revisión. Su médico, Hafnaoui, era un hombre culto, quien cautivo al ícono de la música árabe, y con quien se casó posteriormente.

En 1960 se celebró la Fiesta de la Ciencia, en la que elCcoronel Nasser condecoró a aquellas personalidades que destacaron en las ciencias, arte o literatura. Allí, Oum Kalsoum fue condecorada con la medalla al Mérito. En esa ocasión, el cantante y compositor Abdel Wahhab ofrece componer para la Estrella de Oriente, lo que ella acepta con gran ánimo. Entre las canciones compuestas por él encontramos una de las canciones más conocidas de la cantante: Enta Omri (Tu eres mi vida).

En 1967, la ahora mundialmente famosa Oum Kalsoum llega a París para ofrecer dos conciertos en el muy celebre teatro Olympia, a los cuales asistieron un gran número de embajadores y personalidades de alto rango, como el rey Hussein de Jordania. La taquilla sería destinada esencialmente apoyar económicamente a Egipto en esos tiempos difíciles que atravesaba. Más tarde, en los años 70, realizó una gira por todo Mundo Árabe, cuya taquilla también se destinó esencialmente a la reconstrucción de la milicia egipcia.

El 3 de febrero de 1975, con profunda tristeza el Primer Ministro anuncia la muerte de la Estrella de Oriente, quien sucumbe a la nefritis, enfermedad inflamatoria del riñón. Así, el 5 de febrero, Egipto despide al símbolo de toda una época con manifestaciones multitudinarias de afecto. Hasta hoy en día su música sigue deleitando a millones de personas lo que hace del Astro un ícono inmortal de la música.

*Lic. Laura Tejeda Maza: Licenciada en Estudios Árabes y Maestra en FLE, ambas realizadas en Francia. Políglota y redactora en tres revistas, entre las cuales se cuenta La Voz del Árabe. Aborda diversas temáticas sobre Francia y Mundo arabo-musulmán.

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

La Voz del Árabe (LVÁ) – CULTURA – Cd. de México, noviembre 7 2016

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.